Interrupción en el continuo del paisaje del bosque, una propuesta sobre la unión de opuestos como origen de un proceso creativo. Para nosotros el bosque representa el flujo continuo del tiempo que solo se interrumpe por la aparición de este cuerpo, materia blanca en la naturaleza boscosa de Mar Azul.
Ya con el primer mapa del lugar, detectamos en el recorrido peatonal un corte con una fuerte geografía, 3.00m desde la línea municipal al centro del terreno y 6.00m hacia el retiro de fondo; esto fomentó la decisión de ubicar los dormitorios semienterrados en la parte alta del corte por debajo de la planta baja, con toda la vista orientada al NE ponderando la luz de la mañana y las vistas a todo el bosque del pulmón de la manzana.
Por otro lado existen unos retiros de 3m y 3m a cada lado que hacen que el proyecto sea alargado con una posible excepción que es apoyarse sobre la línea medianera con unos metros cuadrados pero que a futuro provocarían medianeras cosa que queríamos evitar.
Estas decisiones generaron una división programática que se plasma en dos piezas la inferior con la parte privada [dos dormitorios+baños], semienterrada, evita medianera visible, y la planta baja con el área social y de servicios.
La presencia de la luz es constante y pondera la vista hacia el E hacia donde se abre la casa no solo con visuales sino con la expansión que genera un lugar para el ocio y la vida social; del lado opuesto la luz vertical y horizontal se concentra en el patio acentuando la condición intima y particular del estar.
La estructura es de hormigón armado y los cerramientos de pared de ladrillo cerámico, las carpinterías son de aluminio con la intención puesta en el uso del vidrio reflectivo que busca percibir el espacio exterior como copia inalcanzable del entorno, transformando la ventana en casi un hueco, en ausencia de materia. Además se previo desde la obra el mobiliario clave para el armado del espacio tanto exterior como interior, para no dejarlo librado al azar.
El deseo es que este pequeño edificio entregue un clima de contraste con el lugar y su naturaleza; poder caminar, entrar, salir, poder imaginarse en cada espacio y vivir para dejar que el silencio tome el control.